La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha reiterado la importancia vital del petróleo para la supervivencia global, tanto ahora como en el futuro previsible. Esta afirmación fue hecha por Antonio Oburu Ondo, el actual presidente de la OPEP y ministro de Minas e Hidrocarburos de Guinea Ecuatorial, el 5 de julio en Viena, Austria.
“El mundo no puede vivir sin el petróleo” OPEP
Oburu Ondo resaltó que el petróleo ha sido esencial en el pasado, es crucial en el presente y seguirá siendo fundamental en el futuro. Aseguró que es un recurso indispensable y que el mundo no puede existir sin él.
El ministro dio el discurso de apertura en el octavo seminario internacional de la OPEP, un evento de dos días que atrajo a numerosos líderes de la industria de los combustibles fósiles y expertos en cambio climático en Viena.
El secretario general de la OPEP, el kuwaití Haitham Al Ghais, abrió el foro, que llevaba el título «Hacia una transición energética sostenible e inclusiva». También destacó la importancia del petróleo y abogó por promover tecnologías que pudieran reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero.
Al Ghais sostuvo que la transición energética debería basarse en la viabilidad económica, la protección del medio ambiente y la equidad social. Según él, cada país y región debería encontrar su propio camino para reducir las emisiones, ya que no existe una única solución para el desafío climático.
Un seminario lleno de controversias
Estas posturas coinciden con las de otros defensores de la industria petrolera, que dependen en gran medida de ella para sus ingresos. Están particularmente preocupados por las crecientes dificultades que enfrentan para atraer inversiones a sus industrias, lo que ya está afectando su capacidad productiva mientras las inversiones en energías renovables aumentan.
Parviz Shahbazov, ministro de Energía de Azerbaiyán, enfatizó en el foro la necesidad de prestar atención a la disminución de las inversiones en el sector petrolero. El seminario de la OPEP se llevó a cabo en medio de controversias, ya que decidieron excluir a periodistas de Reuters, Bloomberg y Wall Street Journal.
Varias asociaciones de prensa, tanto austríacas como internacionales, protestaron contra esta decisión, calificándola de arbitraria y contraria a la libertad de información. La OPEP, sin dar una explicación clara para las exclusiones, afirmó que se trataba de una nueva estrategia de comunicación, aunque no reveló detalles adicionales sobre esta.