A raíz de una abundante exposición a los rayos ultravioletas del sol, son muchos los tipos de cáncer de piel derivados. Sin olvidar los problemas ambientales que han causado un gran desequilibrio en el clima consecuencia de la excesiva explotación de los recursos naturales cambiando a calor o frío extremos.
Siendo que pronto llegará una temporada para vacacionar y en muchos casos en la playa, es bueno y saludable conocer a qué se expondrá nuestra piel y cómo protegerla. Aunque tomar medidas para protegerse del sol es una responsabilidad de todo el año.
Rayos ultravioleta o rayos UV
La radiación ultravioleta es una forma de radiación no ionizante emitida por el sol y fuentes artificiales como las máquinas bronceadoras o algunos tipos de láser. Aunque ofrece beneficios a las personas como la producción de vitamina D, también puede causar riesgos a la salud ya que ataca directamente el ADN de las células de tu piel. Su longitud de onda está comprendida entre los 400 NM y los 15 NM.
La intensidad de estos rayos también llamados UV y la grandeza de los daños en la piel dependen de la hora. Las horas dónde hay mayor intensidad de rayos UV es entre las 10 y 16 horas, en especial en la primavera. Aunque también en días nublados los rayos ultravioletas pueden afectar e incluso rebotar en agua, arena, pavimento y nieve.
La buena noticia es que nuestra piel tiene maneras de evitar y reparar el daño que causan los rayos del sol. La capa más externa constantemente se deshace de las células muertas y las reemplaza por lo general en un lapso de una o dos semanas, pero entre más tiempo nos exponemos al sol más es el porcentaje de envejecer nuestra piel. Y cuanto más se envejece es más difícil repararse a sí misma.
Protege tu piel
Como ya vimos, la luz solar nos beneficia. Entre otras cosas ya mencionadas nos ayuda a mantener nuestros patrones de sueño en orden y poder permanecer despiertos durante el día y descansar por la noche. También nos ayuda en nuestro estado anímico, tomar poco sol en invierno puede llevarnos a caer en depresión.
Pero… a pesar de todo esto es necesario tomar medidas de protección debido a que estos rayos UV también conlleva algunos peligros:
- Protector solar: es tu aliado diario, sea que estés muy expuesto al sol o no. Su función es filtrar los rayos UV, por lo que cada dos horas se recomienda aplicarlo.
- Prendas de vestir que protejan tu piel: por ejemplo, camisas manga larga, pantalones largos, gorras, bufandas, entre otros, que sean de tu gusto.
- Lentes de sol: los rayos UV no sólo afectan la piel también afectan nuestros ojos. Adquiérelos y cerciórate de que la etiqueta especifique que están especialmente diseñados para protegerte contra estos rayos.