Los líderes de Corea del Sur y Japón se reunieron este jueves para tratar de reavivar los lazos socavados en los últimos años por disputas históricas. Ambas naciones acordaron reactivar sus relaciones diplomáticas y comerciales ante la inminente amenaza que enfrentan por Corea del Norte.
Les urge formar un frente unido
El primer ministro japonés Fumio Kishida tras su reunión con el presidente surcoreano Yoon Suk Yeol afirmó que habían acordado fortalecer las relaciones entre ambos países pues les urge en el contexto actual. La reunión entre los diplomáticos representa un gran paso hacia la normalización de las relaciones, sentenció el primer ministro de Japón.
Este encuentro formaba parte de la agenda del plan de Seúl, el cual tiene el objetivo de indemnizar a los surcoreanos que fueron sometidos a trabajos forzados por los japoneses durante la primera mitad del siglo 20. Esta reunión dio indicios de nuevos avances hacia la reconciliación y se espera resucite la diplomacia lanzadera, un mecanismo en el que ambos mandatarios tendrán encuentros periódicos.
Japón también levantará las restricciones a la exportación de materiales semiconductores surcoreanos que había introducido en 2019. Por su parte Corea del Sur retirará su denuncia sobre este expediente ante la Organización Mundial del Comercio OMC.
La amenaza nuclear inminente de Corea del norte
Ambos países enfatizaron la amenaza nuclear cada vez mayor que representa Corea del Norte para la estabilidad y la paz de toda la región por lo que acordaron que es necesario la cooperación estrecha para enfrentar sabiamente las amenazas ilegales y los desafíos que enfrenta la comunidad internacional.
El presidente de Corea del Sur hizo del restablecimiento de los lazos con Japón una de las principales prioridades tras su elección hace un año. También podría ser invitado por Japón a la cumbre del G7 en mayo en Hiroshima.
En 2018 un fallo judicial de Corea del Sur ordenaba a algunas empresas japonesas pagar una compensación a surcoreanos que habían sido obligados al trabajo forzoso durante la ocupación japonesa con lo que las relaciones bilaterales entraron en nuevo periodo de crisis.
Sin embargo, los cambios dramáticos a nivel internacional están afectando la seguridad de ambas naciones por lo que se hace más urgente que nunca que Japón, Estados Unidos y Corea del Sur se coordinen y desarrollen su capacidad de disuasión según los entendidos.
Dejar una respuesta